Núñez Feijóo aboga porque Rodrigo Rato haga, al menos, un paréntesis en su militancia en el PP
El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha abogado por "al menos hacer un paréntesis" en la militancia de aquellos que fueron titulares de las tarjetas opacas que fueron utilizadas durante años por consejeros de Caja Madrid y Bankia. "Todos los militantes de un partido político saben cuáles son los límites de su militancia y hay determinadas actuaciones y determinadas conductas que proceden al menos a hacer un paréntesis en esa militancia", ha señalado en declaraciones a los periodistas tras asistir a un desayuno informativo organizado por Nueva Economía Fórum, preguntado acerca de la posibilidad de que el PP expulse al expresidente de Bankia, Rodrigo Rato.
El presidente autonómico cree que los ceses o expulsiones son "un tema de menor calado" ya que "lo importante" es que, ante este escándalo, se demuestre que en España "se cumplen las leyes, el Estado de Derecho funciona" y que se pueda constatar que "el poder judicial es independiente del poder ejecutivo". Feijóo ha recalcado que su partido "está tomando decisiones muy importantes y está clarificando todos los comportamientos irregulares, todas las faltas de ética y todas las faltas y delitos que se hayan podido cometer". "El Gobierno es y será implacable con aquellos que no cumplan las leyes de todo tipo, por supuesto las leyes tributarias y fiscales".
Para el presidente gallego, se está demostrando que "el que la ha hecho la paga" y considera que pesar de que alguien pueda estar "durante algún tiempo bajo el paraguay de la falta de conocimiento general" de sus propias actuaciones "al final se sabrá" y "se sancionará". "Desde la política y la democracia se pueden detectar y sancionar las acciones irregulares", ha afirmado, para después añadir que en España "los bolsillos tienen que ser de cristal, las cuentas tienen que ser transparentes y que el la ha hecho la tiene que pagar". En su opinión, el escándalo de las tarjetas B de Caja Madrid hace que se pregunte cómo es posible que las auditorías de las entidades financieras no reflejasen adecuadamente sus gastos y cómo lo es que el Banco de España no detectase "un sistema de retribución paralelo".
Feijóo sostiene que la inspección del Banco de España durante los años 2008 y 2011 "no ha funcionado" y, por ello, cree que "no ha estado a la altura de sus técnicos" ni del "rigor" necesario. De hecho, ha subrayado que "la última gobernanza del Banco de España es para olvidar". Sin embargo, ha querido agradecer al Gobierno de Mariano Rajoy que a través del FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) vaya a investigar y a reclamar los gastos realizados con las tarjetas opacas de Caja Madrid.
Archivada una denuncia de la CIG
La Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha confirmado el archivo de la querella presentada el pasado mes de junio por la Confederación Intersindical Galega (CIG) contra exdirectivos de las cajas de ahorros gallegas (Caixa Galicia y Caixanova y su posterior fusión, Novacaixagalicia) y de NCG Banco, por la emisión de participaciones preferentes. En un auto hecho público, los magistrados Ángela Murillo, Carmen Paloma González y Juan Francisco Martel aseguran que la Audiencia Nacional no es competente para investigar a los exdirectores generales de las entidades y las personas que integraban la comisión delegada de los consejos de administración de las cajas desde el año 2003.
Insisten en que, al igual que sucedió con una denuncia previa por los mismos hechos presentada por el sindicato, no pueden admitir la denuncia. "La respuesta sigue siendo la misma: la falta de competencia de este órgano judicial para tramitar la querella, dado que no reúne los requisitos establecidos en el artículo 65 de la LOPJ", dice el auto. La legislación establece que la Audiencia Nacional es competente para conocer aquellos hechos que "puedan producir grave repercusión en la economía nacional o perjuicio patrimonial en una generalidad de personas en el territorio de más de una audiencia".
El sindicato gallego presentó la querella para reclamar "justicia" ante "la complicidad de los gobiernos central y autonómicos y de los organismos supervisores y de control", entre los que cita a Banco de España y FROB. Con anterioridad, presentó junto al sindicato vasco ELA una querella contra los gobiernos y el Banco de España que fue archivada. En 2011, también, denunció ante la Fiscalía General del Estado -que dio traslado a Anticorrupción- a los exdirectivos de Novacaixagalicia. La Fiscalía Anticorrupción abrió una investigación y presentó posteriormente una querella por el cobro de indemnizaciones multimillonarias.
El sindicato anunció que había identificado entonces 79 personas, entre las que se encontraban los antiguos directores generales de Caixa Galicia y Caixanova, José Luis Méndez y José Luis Pego, respectivamente, y los que eran presidentes de las cajas, Mauro Varela y Julio Fernández Gayoso, a los que atribuía "la ideación y ejecución de un plan de captación fraudulenta de ahorro del público minorista, con objeto de financiar sus entidades, en situación financiera deficitaria". Entre los delitos que les atribuían, figuraban estafa, apropiación indebida, publicidad engañosa, estafa de inversores, falsedad de cuentas anuales, administración fraudulenta y desleal, abuso de información privilegiada y maquinación para alterar el precio de las cosas.
Fotografía: Gabinete de Comunicación de la Xunta de Galicia
El presidente autonómico cree que los ceses o expulsiones son "un tema de menor calado" ya que "lo importante" es que, ante este escándalo, se demuestre que en España "se cumplen las leyes, el Estado de Derecho funciona" y que se pueda constatar que "el poder judicial es independiente del poder ejecutivo". Feijóo ha recalcado que su partido "está tomando decisiones muy importantes y está clarificando todos los comportamientos irregulares, todas las faltas de ética y todas las faltas y delitos que se hayan podido cometer". "El Gobierno es y será implacable con aquellos que no cumplan las leyes de todo tipo, por supuesto las leyes tributarias y fiscales".
Para el presidente gallego, se está demostrando que "el que la ha hecho la paga" y considera que pesar de que alguien pueda estar "durante algún tiempo bajo el paraguay de la falta de conocimiento general" de sus propias actuaciones "al final se sabrá" y "se sancionará". "Desde la política y la democracia se pueden detectar y sancionar las acciones irregulares", ha afirmado, para después añadir que en España "los bolsillos tienen que ser de cristal, las cuentas tienen que ser transparentes y que el la ha hecho la tiene que pagar". En su opinión, el escándalo de las tarjetas B de Caja Madrid hace que se pregunte cómo es posible que las auditorías de las entidades financieras no reflejasen adecuadamente sus gastos y cómo lo es que el Banco de España no detectase "un sistema de retribución paralelo".
Feijóo sostiene que la inspección del Banco de España durante los años 2008 y 2011 "no ha funcionado" y, por ello, cree que "no ha estado a la altura de sus técnicos" ni del "rigor" necesario. De hecho, ha subrayado que "la última gobernanza del Banco de España es para olvidar". Sin embargo, ha querido agradecer al Gobierno de Mariano Rajoy que a través del FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) vaya a investigar y a reclamar los gastos realizados con las tarjetas opacas de Caja Madrid.
Archivada una denuncia de la CIG
La Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha confirmado el archivo de la querella presentada el pasado mes de junio por la Confederación Intersindical Galega (CIG) contra exdirectivos de las cajas de ahorros gallegas (Caixa Galicia y Caixanova y su posterior fusión, Novacaixagalicia) y de NCG Banco, por la emisión de participaciones preferentes. En un auto hecho público, los magistrados Ángela Murillo, Carmen Paloma González y Juan Francisco Martel aseguran que la Audiencia Nacional no es competente para investigar a los exdirectores generales de las entidades y las personas que integraban la comisión delegada de los consejos de administración de las cajas desde el año 2003.
Insisten en que, al igual que sucedió con una denuncia previa por los mismos hechos presentada por el sindicato, no pueden admitir la denuncia. "La respuesta sigue siendo la misma: la falta de competencia de este órgano judicial para tramitar la querella, dado que no reúne los requisitos establecidos en el artículo 65 de la LOPJ", dice el auto. La legislación establece que la Audiencia Nacional es competente para conocer aquellos hechos que "puedan producir grave repercusión en la economía nacional o perjuicio patrimonial en una generalidad de personas en el territorio de más de una audiencia".
El sindicato gallego presentó la querella para reclamar "justicia" ante "la complicidad de los gobiernos central y autonómicos y de los organismos supervisores y de control", entre los que cita a Banco de España y FROB. Con anterioridad, presentó junto al sindicato vasco ELA una querella contra los gobiernos y el Banco de España que fue archivada. En 2011, también, denunció ante la Fiscalía General del Estado -que dio traslado a Anticorrupción- a los exdirectivos de Novacaixagalicia. La Fiscalía Anticorrupción abrió una investigación y presentó posteriormente una querella por el cobro de indemnizaciones multimillonarias.
El sindicato anunció que había identificado entonces 79 personas, entre las que se encontraban los antiguos directores generales de Caixa Galicia y Caixanova, José Luis Méndez y José Luis Pego, respectivamente, y los que eran presidentes de las cajas, Mauro Varela y Julio Fernández Gayoso, a los que atribuía "la ideación y ejecución de un plan de captación fraudulenta de ahorro del público minorista, con objeto de financiar sus entidades, en situación financiera deficitaria". Entre los delitos que les atribuían, figuraban estafa, apropiación indebida, publicidad engañosa, estafa de inversores, falsedad de cuentas anuales, administración fraudulenta y desleal, abuso de información privilegiada y maquinación para alterar el precio de las cosas.
Fotografía: Gabinete de Comunicación de la Xunta de Galicia
R.