Vigo lidera la producción de automóviles en España que registró una caída del 8'6% en las exportaciones de coches en 2005
Vigo mantiene el liderazgo en la producción nacional de automóviles según el Informe Gaxa de Automoción del que también se desprende que España redujo en 2005 un 8,6% su producción de automóviles y ha perdido el cuarto puesto en el ránking mundial de países exportadores de coches, con 2.247.000 unidades, al ser superada por Corea del Sur, con 2.590.000. Un ranking liderado en 2005 por Japón, con 4.860.000 unidades exportadas; seguido de Francia, con 3.841.000; y Alemania, con 3.795.000.
El estudio recomienda que, para combatir esta tendencia negativa, las plantas que operan en España han de asumir mayores responsabilidades en el seno de sus respectivos grupos, y detalla que una planta piloto permite participar en la toma de decisiones sobre las que posteriormente se asentará la capacidad productiva.
«Esta podría ser la razón por la que la planta de Vigo de PSA Peugeot Citroën resiste un año más como líder de producción de España», destaca el informe, que argumenta que la industria en general ha sido «víctima» del «mal funcionamiento comercial» de los modelos que se fabrican en España ante el principal mercado hacia el que se dirige su exportación: Europa.
Del análisis realizado sobre el contexto global, Gaxa considera que la automoción mundial cifra en estos momentos su volúmenes productivos y sus expectativas de mercado en el continente asiático. «Más que nunca, la realidad productiva y la ley de la oferta y la demanda interactúan para dejar fuera de foco a Europa y Estados Unidos y centrarse en Asia», asevera el estudio.
Así, especifica que, en 2005, GM, Ford y Chrysler acumularon el 56% del mercado estadounidense, la cifra más baja de su historia, y añade que, en relación a 2004, éstas perdieron dos puntos en favor de marcas extranjeras, especialmente japonesas, que ya copan el 36% de las ventas en Estados Unidos. Por lo que se refiere a Europa, relata que la disputa entre fabricantes es «más ajustada» y que los japoneses no han podido comer terreno a los constructores europeos de la misma manera que hicieron en Estados Unidos con los americanos. En términos globales, explica el estudio, Europa sostuvo su producción sobre dos pilares: entre los constructores tradicionales, gracias al comportamiento de Alemania, el único país que aumentó la producción en 2005 (3,4%), y sobre todo a la aportación productiva del centro y este del continente, en el que destaca Turquía (915.000 unidades producidas en 2005).
El informe concluye que Estados Unidos, Europa y Japón comparten la premisa de que sus mercados se comportan como si «hubieran tocado techo», al contrario de lo que ocurre en el continente asiático, que produce el 40% de los automóviles de todo el mundo y en el que destaca China como país emergente en el sector.
El estudio recomienda que, para combatir esta tendencia negativa, las plantas que operan en España han de asumir mayores responsabilidades en el seno de sus respectivos grupos, y detalla que una planta piloto permite participar en la toma de decisiones sobre las que posteriormente se asentará la capacidad productiva.
«Esta podría ser la razón por la que la planta de Vigo de PSA Peugeot Citroën resiste un año más como líder de producción de España», destaca el informe, que argumenta que la industria en general ha sido «víctima» del «mal funcionamiento comercial» de los modelos que se fabrican en España ante el principal mercado hacia el que se dirige su exportación: Europa.
Del análisis realizado sobre el contexto global, Gaxa considera que la automoción mundial cifra en estos momentos su volúmenes productivos y sus expectativas de mercado en el continente asiático. «Más que nunca, la realidad productiva y la ley de la oferta y la demanda interactúan para dejar fuera de foco a Europa y Estados Unidos y centrarse en Asia», asevera el estudio.
Así, especifica que, en 2005, GM, Ford y Chrysler acumularon el 56% del mercado estadounidense, la cifra más baja de su historia, y añade que, en relación a 2004, éstas perdieron dos puntos en favor de marcas extranjeras, especialmente japonesas, que ya copan el 36% de las ventas en Estados Unidos. Por lo que se refiere a Europa, relata que la disputa entre fabricantes es «más ajustada» y que los japoneses no han podido comer terreno a los constructores europeos de la misma manera que hicieron en Estados Unidos con los americanos. En términos globales, explica el estudio, Europa sostuvo su producción sobre dos pilares: entre los constructores tradicionales, gracias al comportamiento de Alemania, el único país que aumentó la producción en 2005 (3,4%), y sobre todo a la aportación productiva del centro y este del continente, en el que destaca Turquía (915.000 unidades producidas en 2005).
El informe concluye que Estados Unidos, Europa y Japón comparten la premisa de que sus mercados se comportan como si «hubieran tocado techo», al contrario de lo que ocurre en el continente asiático, que produce el 40% de los automóviles de todo el mundo y en el que destaca China como país emergente en el sector.
R.